Imagina que te despiertas por la mañana, sales a la terraza, coges un poco de agua y riegas tus tomates para que el día de mañana puedas hacerte una ensalada deliciosa para cenar. No, no nos hemos vuelto locos, porque hoy en día es cada vez más normal hacerse un huerto urbano en casa.
Los puedes encontrar en pequeñas parcelas de tierra en las afueras, en un solar del centro de la ciudad o en el patio de tu vecino. Ahora que cada vez se lleva más lo de ser sostenibles con el mundo, es un buen momento para ver cómo podemos cuidar de la naturaleza mientras nos preparamos alimentos deliciosos para el futuro.
¿Quieres saber cómo montarte tu propio huerto urbano? Pásate al lado veggie de la vida con estos consejos que te enseñamos. Porque los jóvenes In se preocupan por su salud y por la de aquellos que les rodean.
Prepárate un huerto urbano de lujo siguiendo estos pasos
- Decide dónde vas a tenerlo. Si tienes una terraza digna de un ático en el centro de Nueva York, el lugar está bastante claro, pero si no no te preocupes. También puedes aprovechar el patio que tengas con los vecinos, si les pides permiso, e incluso tenerlo dentro de casa con un sistema hidropónico.La última opción, tal vez la más lógica, es tener un huerto construido en la terraza del edificio con cajones de madera o mesas de cultivo. Ten en cuenta que sea un sitio que reciba suficiente luz solar, que tenga acceso a una fuente de agua y que esté orientado hacia el suroeste o el sur de la casa.
- ¡Prepara tus herramientas! No esperarás que Mario Bros sea el mejor fontanero del mundo si no le das una llave inglesa. Pues con el huerto urbano lo mismo. Prepara estos instrumentos y verás cómo todo sale sobre ruedas:
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- Azadilla de lanza, para retirar las malas hierbas.
- Azadilla de horquilla, para cavar y remover la tierra.
- Cultivador, para airear la superficie.
- Trasplantador, para plantar las semillas.
- Rastrillo de mango, para arrastrar los restos vegetales.
- Capazo y guantes, para trasplantar la tierra y cuidar tus manos.
- Compra la mesa de cultivo. Cuando sepas en qué recipiente quieres tenerlo todo, elige una mesa de cultivo lo suficientemente grande para el número de hortalizas o verduras que quieras plantar. Decídete por las de madera, que son más resistentes y son más fáciles de pintar.
- Elige el abono. ¡Ya casi lo tienes! Elige siempre un sustrato que te garantice sujeción, una humedad adecuada y unos nutrientes que ayuden a las plantas a crecer rápidamente. Infórmate de cada uno en la tienda en función de lo que quieras plantar, y asegúrate de seguir sus indicaciones para no pasarte con el abono.
- Ahora lo divertido: ¿qué quieres plantar? Puedes decidirte por comprar semillas o plantones. Las primeras están hechas para huertos pequeños, y te permiten conseguir todo tipo de lechugas, zanahorias o patatas. Los segundos llevan un tiempo creciendo y tardarán menos en salir, pero te serán más caros. Estos pueden servirte, por ejemplo, si quieres ver resultados rápidos y animarte para comprar más en el futuro.
- Cuida bien de tu huerto urbano. Ahora que ya lo tienes todo listo, tienes que abonar en cantidades adecuadas y saber cómo regar el cultivo, haciéndolo de forma frecuente pero en intervalos cortos. De esta forma te asegurarás de que controlas la cantidad de agua que cae, en función de la época del año en la que te encuentras.
La clave para que tu huerto urbano sea la bomba es que consultes siempre la opinión de los expertos en la tienda y leas las instrucciones de los sobres de semillas cuando los compres. Cada fruta u hortaliza requiere un tratamiento distinto, pero no pasará mucho tiempo hasta que descubras cómo se debe plantar cada una.
Mucho ánimo y no te olvides de enviarnos tus fotos si te has animado a crear tu propio huerto urbano para tener tus alimentos siempre frescos y listos para consumir.