¿Qué mejor forma de pasar el fin de semana que perderse en un pueblo alejado del resto de la humanidad? Si quieres hacer una escapada segura, te contamos cuáles son algunas de las casas rurales con más encanto. Lugares para estar en paz con tus amigos y ponerte en sintonía con la naturaleza.
Una alternativa de ocio que nada tiene que envidiar a alguno de esos destinos que, por el panorama actual, no podemos visitar. ¿Te apuntas a hacer este recorrido por la geografía española?
Cuenca – Mirador de Carboneras
Este paraje se encuentra en la sierra baja de Cuenca, a media hora de la ciudad y a cinco minutos del centro del pueblo. Es el sitio idóneo para hacer una escapada con colegas y disfrutar del descanso, acompañado de servicios como jacuzzi propio, chimenea, barbacoa y un huerto ecológico para fundirte con la naturaleza.
Con una trayectoria corta, este alojamiento ha conseguido posicionarse ya como uno de los más top. Con sus 215 metros cuadrados que supuran elegancia y confort, podrás llevar a cabo actividades tan diversas como montar a caballo, senderismo, una vuelta en quads o simplemente relajarte en su precioso jardín.
Badajoz – Complejo Turístico Rural Marcelina
Este complejo tiene un jardín de 600 metros con piscina, barbacoa y zona de relax para luchar contra agorafobias, síndromes de la cabaña y cualquier atisbo de estrés. Teniendo dos casas rurales dentro del complejo para elegir, podrás disfrutar de actividades de montaña desde las más míticas como el senderismo, a las más novedosas con sus tirolinas. Y, si lo tuyo es el ambiente acuático, prepárate para tirar la caña, pero de verdad, porque también podrás salir a pescar.
Huelva – El Castañar de Aracena
En la provincia de Huelva encontrarás esta fantástica finca ecológica de 15 hectáreas en las que disfrutar del medio ambiente, confort y contacto con la naturaleza. El lugar ideal para mezclar relax con adrenalina, con actividades que van desde barranquismo, rafting o piragüismo, hasta un tranquilo paseo en globo o sacar tu vena más exploradora con una ruta de espeleología.
Albacete – Casa Rural el Paraíso
Su nombre ya deja poco a la imaginación. Es el sitio ideal para una reunión familiar, o con amigos, en plena naturaleza. Cuenta con una zona acristalada de barbacoaen el exterior, donde podrás hacer una comida de chill mientras observas cómo las hojas caen hasta cubrir el suelo otoñal. Pasea descalzo por el césped o disfruta con su huerto y su invernadero para empaparte de la esencia de la naturaleza.
A orillas del río Sella descansa este rincón, con todas las comodidades de la ciudad, pero en un ambiente rural que enamora. Un lugar en el que podrás probar las frutas autóctonas de la zona recién cogidas del árbol. Donde echarse una partidita de paintball entre colegas o picarte con ellos en una carrera de buggies.
Naturaleza e historia se unen en el pueblo medieval de Uncastillo. Aquí desconectarás de tu rutina para conectar con tu lado más curioso. Podrás realizar actividades en la naturaleza, pero si eres más román(t)ico, tienes parajes semidesérticos para perderte, y castillos y monasterios para sacar tu lado más renacentista.
Segovia – Casa rural Río Duratón
Bueno, el relax está muy bien, pero también apetece algo de gastronomía, ¿no?
En el norte de Segovia podrás vivir una de las experiencias enogastronómicas más recomendadas del país, a través de una ruta por la ribera del Duero y el paisaje de las Hoces del Duratón. No te olvides probar algunas de las actividades que ofrecen (piragüismo, senderismo, recogida de setas, pesca…) y traerte algún producto típico de la zona de recuerdo.
Disfrutar de la tranquilidad de la vida rural nunca había sido tan recomendable como en estos tiempos, pero recuerda que estar alejado no significa ser menos responsable. Respeta las medidas de seguridad estipuladas, y que la mascarilla siga siendo tu complemento ideal para pasar una escapada con encanto.