EMPRENDER IMPLICA HAER UN GRAN DESEMBOLSO DE DINERO
Una de los mayores problemas a la hora de emprender un nuevo negocio es el capital. Y es que, por lo general, emprender implica hacer un desembolso importante de dinero.
Hablamos de cifras muy elevadas que no podemos afrontar con fondos propios. Por eso, suele ser habitual acudir a otras fuentes de financiación. ¿Sabes cuáles son las más comunes?
Los bancos, las subvenciones y el crowdfunding son las principales fuentes de financiación.
- Banco: pedir un préstamo al banco es la opción elegida por muchos. Ya te hemos hablado en este blog de las diferencias entre un crédito y un préstamo, o en qué situaciones pedir uno. ¿Sabes qué ventajas tienen los de Joven In? Puedes elegir entre tres préstamos distintos: Consumo, Estudios y Anticipo de Nómina.
- Ahorros: antes de embarcarte en la aventura de un nuevo negocio, lo ideal es que acumules un pequeño colchón económico. Los inversores suelen exigir garantías de compromiso. Y no hay mayor compromiso que invertir tus ahorros en tu idea de negocio.
- Subvenciones: la Administración suele conceder ayudas económicas a los emprendedores con el fin de impulsar la creación de nuevas empresas. Infórmate para ver cuál puedes solicitar.
- Familia y amigos: siempre puedes recurrir a tus allegados para pedirles dinero.
- Crowdfunding: a través de una plataforma online, puedes obtener ingresos de particulares. Es una de las fuentes de financiación más de moda en la actualidad.
Y tú, ¿tienes una idea de negocio?