LA CONDICIÓN PRINCIPAL ES DISPONER DE BATERÍA EN EL MÓVIL
Poco a poco, pagar con el móvil se está convirtiendo en algo cotidiano, igual que chatear o hacer fotos. Una tecnología que nos permite pagar nuestras compras en un plis, de forma rápida y segura, sin necesidad de llevar la cartera encima.
Sin embargo, aún son muchas personas las que no han probado esta tecnología. ¿Qué es lo que nos frena? ¿La inseguridad? ¿El desconocimiento? Hoy, desmontamos algunos de los principales mitos del pago por móvil:
Inseguridad
Es normal que sintamos cierta preocupación ante las nuevas tecnologías, pero, créenos: el pago por móvil es una práctica de lo más segura.
Míralo así: tu móvil funciona exactamente igual que tu tarjeta bancaria. Cuando pagas con el móvil, lo haces a través de una tarjeta asociada al mismo. Si das por hecho que pasar tu tarjeta por un terminal TPV es seguro, porque lo es, no tengas dudas con el pago por móvil. Para más seguridad aún, puedes mantener la tecnología NFC que obliga a meter el número PIN en compras superiores a 20€.
Tipo de dispositivo
¿Hace falta tener un pepino de móvil? No, no hace falta que te compres el iPhone 11 para poder pagar con él. Hoy en día, la mayoría de dispositivos de gama media disponen de esta función. Si tu sistema operativo es iOS, puedes guardar tus tarjetas de Caja Rural en Apple Pay o descargarte la app Ruralvía Pay, también disponible para Android.
Datos
Tranqui, que pagar con tu móvil no consume datos. Es bastante lógico pensar que sí, pero, como hemos dicho anteriormente, esta tecnología funciona igual que tu tarjeta bancaria. Si tu tarjeta nunca ha necesitado estar conectada a Internet, ¿por qué tu móvil iba a hacerlo? El terminal TPV sí que lo necesita, ya que la conexión se hace a través de él.
Y tú, ¿pagas ya con tu móvil?