La gamificación es una técnica centrada en aplicar elementos de los juegos a contextos no lúdicos, como las empresas o la educación. Esta técnica se basa en el uso de mecánicas, dinámicas y elementos de juego para motivar a los usuarios a participar en las actividades o procesos planteados.
En el ámbito empresarial, una organización que cuenta con procesos y dinámicas de gamificación, baraja cifras de mejora de compromiso de los empleados y clientes en torno a un 48 %, y consiguen aumentar su facturación en torno a un 36%. Por lo que se la ha comenzado a tener en cuenta. También en otros contextos como la educación.
La gamificación en la educación
La gamificación se ha convertido en una herramienta cada vez más popular en la educación. Implementar esta técnica tiene múltiples ventajas porque puede ayudar a mejorar el aprendizaje de muchas y muy variadas maneras. Os dejamos algunas:
- Aumentando la motivación: ya que les hace sentir más motivados para aprender y les ofrece un retos y recompensas por sus logros.
- Mejorando el engagement: puede ayudar a los alumnos a mantenerse comprometidos con el aprendizaje, ya que les ofrece una experiencia más atractiva y divertida, lo que mejora la predisposición a aprender y reduce la resistencia habitual a adquirir nuevos conocimientos, por el esfuerzo cognitivo que supone.
- Fortaleciendo el aprendizaje: puesto que la gamificación puede ayudar a los alumnos a retener mejor la información, ofreciéndoles un contexto más significativo para el aprendizaje.
Cómo aplicar la gamificación en la educación
Está demostrado, la gamificación facilita el aprendizaje, y los datos que arrojan algunos estudios lo confirman.
La gamificación cuenta con la ventaja de que puede implementarse de diversas formas en cualquier ámbito. En concreto, en el contexto educativo, la gamificación se puede aplicar:
- Creando juegos educativos: Los juegos educativos son una forma muy efectiva de aplicar la gamificación en la educación. Estos juegos pueden ayudar a los alumnos a aprender conceptos y habilidades de forma divertida y atractiva.
- Integrando elementos de juego en las actividades diarias educativas: Los elementos de juego, como los puntos, las medallas o los niveles, se pueden integrar en las actividades educativas para aumentar la motivación y el engagement de los alumnos.
- O creando entornos de aprendizaje gamificados: Los entornos de aprendizaje gamificados son espacios educativos que utilizan la gamificación para crear una experiencia de aprendizaje más atractiva y divertida.
Y si quieres saber más sobre gamificación y finanzas… ¡Visita nuestro blog!