Te levantas, desayunas, te pones la ropa, coges tu coche o el transporte público para llegar hasta la oficina…¿y subes en ascensor a la oficina que está en el primer piso? Bueno, tampoco vamos a ponernos exquisitos, pero el primer paso para ser sostenible en la oficina es darte cuenta de cuánto puedes ahorrar con gestos muy pequeños.
Hoy vamos a enseñarte qué hábitos sostenibles puedes implantar en la ofi para que tanto tú como tus compañerxs de trabajo os pongáis las pilas (las de bajo consumo, claro está) cuidando de la naturaleza y de las cuentas de la empresa. ¿Tienes ganas de saber cómo hacerlo?
¿Por qué ser sostenible en la oficina?
Sí, lo sabemos. Lo más fácil es tener vasitos de plástico para el agua, poner la luz todo el día para que no se te queden los ojos de topo y tirar todos los residuos al mismo contenedor para no gastar tiempo pero… ¿sabes la repercusión que tiene esto para la naturaleza?
Según un informe de la OCDE, por ejemplo, ya hay 139 millones de toneladas de plástico en mares y ríos de todo el mundo. La pandemia ha hecho que se incrementen los plásticos de un solo uso, pero es que tan solo el 9% de todo ese plástico se recicla a nivel global.
Estos datos son preocupantes, porque indican que tenemos un largo camino por recorrer para implementar una mentalidad ecológica y responsable en nuestro día a día. A continuación queremos darte consejos para que empieces a llevar una vida mucho más sostenible en uno de los lugares donde más horas pasas en el día: tu querida y amada oficina.
Sé sostenible en la ofi… con estos tips súper fáciles
- Digitaliza tus documentos. Ser paper free no solo hace feliz a las finanzas de la empresa, sino también a los árboles. Empieza por evitar el consumo de folios proponiendo al equipo que haga todas sus tareas online, con un gestor de recursos que les permita llevar todos sus compromisos en una agenda digital 100% sostenible. Además es un 3×1, porque no gastaréis en bolis y os ahorraréis cartuchos de tinta para la impresora. ¡Easy pisy!
- Haz una zona solo para el reciclaje. Aunque sea muy mono tener una esquina de la cocina con papeleras de tres colores, tienes que centrarte: lo haces por el bien de la naturaleza y no por la estética. Puedes poner un pequeño papel con instrucciones encima de ellas para que cada empleadx sepa dónde tiene que tirar el plástico de su bollito de máquina o la lata de atún que ha traído para hacerse el bocadillo de medio día. No te olvides de incluir envases para el papel, el plástico, el cristal, los residuos orgánicos y otros que sirvan como punto limpio para las pilas de los ratones, por ejemplo.
- Aprovecha las horas de luz. Como te decíamos, es muy tentador poner la luz artificial por las mañanas para que ilumine hasta el espíritu de la virgen María. Sin embargo, es mucho más sensato abrir bien las persianas en cuanto salga el sol, lo que también te ayudará a regular la temperatura de la sala durante las próximas horas. Luego, por la tarde, puedes bajarlas para conservar el calor mientras te aseguras de que enciendes las bombillas de bajo consumo o LED.
- Reutiliza aquello que tenga un uso. ¿Conoces las 3 R? Cuando reduces, reutilizas y reciclas te aseguras de dar una segunda vida a aquellos objetos que aún no han perdido toda su utilidad. Puedes seguir las reglas del Do it Yourself y utilizar los cartones para hacer un portafolios para tus compañerxs, o intentar que un mueble antiguo de casa tenga una oportunidad nueva como mesita de apoyo para la cocina. Haz un brainstorming con tus colegas y verás cómo se os ocurren ideas la mar de divertidas para hacer en equipo.
- Ten plantas en la ofi. Las plantas o las flores no solo son preciosas, sino que ayudan a mantener la temperatura estable en toda la oficina. Además, aportan un toque de humedad cuando hay mucho calor y absorben una parte de las radiaciones que emiten los aparatos electrónicos como teléfonos móviles, tablets u ordenadores portátiles. Y si eres de lxs que tiene miedo a las plantas porque piensas que te roban el oxígeno para hacer la fotosíntesis, no te preocupes. Está demostrado que la cantidad de aire que se llevan es mínima y, desde luego, te permitirá respirar la mar de tranquilx.
Ten por seguro que, con todas estas ideas, estarás ocupadx durante un buen rato haciendo que tu vida en la oficina sea súper sostenible. Impleméntalas poco a poco en tu día a día, por ejemplo, con una a la semana, para que todos vean que vas en serio y quieres cambiar los hábitos para hacerlos más ecológicos. Verás como, con el tiempo, ellos se sumarán a tu nueva aventura. ¡Ánimo!