Si eres de los que tiembla cuando oye la palabra “hipoteca”, no te preocupes, ¡que no muerde! De hecho, hay un montón de trucos que puedes aprovechar para que el momento de contratar tu próximo préstamo hipotecario venga a ti con la mayor comodidad y sin una pizca de incertidumbre.
Hoy queremos abrirte la caja de Pandora con las claves que debes tener en cuenta antes de pedir tu hipoteca, además de cuál es la adecuada para ti según la situación que estés viviendo. Qué cool, ¿verdad? Pues vamos a por ello.
¿Cuál es el mejor tipo de hipoteca para ti?
Comprarte la casa de tus sueños es súper easy si pides la hipoteca Joven In perfecta para ti. Si quieres saber cuántas existen, y cuál de ellas te da las mejores garantías, solo tienes que prestar atención:
- Hipoteca fija. Gracias a su tipo de interés fijo tendrás estabilidad a lo largo de los años, porque la cuota mensual que deberás pagar será la misma hasta el final. Dime tú si no vas a controlar todo tu gasto. Qué flipada.
- Hipoteca variable. Con el tipo de interés variable tendrás más flexibilidad a la hora de pagar, porque la cuantía del préstamo se revisa periódicamente, lo normal es cada año, y la cantidad a pagar cada mes puede variar según la evolución del índice al que esté referenciado. Un ejemplo de ello es el Euribor. Esto significa que puedes beneficiarte de bajadas en el índice referente.
- Hipoteca mixta. El tipo de interés mixto combina las dos anteriores para traerte lo mejor de cada una. En tus primeros años harás un esfuerzo económico mayor al tipo fijo, con lo que sabrás mejor cuánto vas a pagar. Cuando hayan pasado 5 o 10 años, cuando tu capacidad de pago haya aumentado junto con tu sueldo (¡esperemos!), podrás beneficiarte de posibles bajadas en los tipos o soportarlos con más solvencia.
Lo mejor que puedes hacer para pedir tu hipoteca
Ahora que ya sabes las tres hipotecas Joven In que tiene preparada tu entidad para ti, ¿sabes lo que tienes que hacer antes de pedirlas? Además de buscar toda la información posible y pedir ayuda siempre que lo necesites, es importante que tengas en cuenta estos consejos:
- Comprueba bien los requisitos. Como imaginarás, necesitas tener bien atados todos los detallitos que se te pueden escapar antes de solicitar el préstamo. ¿Tienes tu DNI a mano, tu última declaración de la renta, una copia de tu contrato de trabajo? Infórmate bien para tenerlo todo ready de antemano.
- Ten en cuenta tu cuota mensual baby. Parecerá obvio, pero solo puedes contratar una hipoteca que te permitas pagar a lo largo del tiempo. Saca la calculadora, mira cuáles son tus ingresos y cuáles son tus gastos comunes y haz una regla de tres. Si esta cuota está por debajo del 35% de tus ingresos, vas por el buen camino y tendrás cierta holgura. ¡Sigue así!
- Revisa bien los gastos asociados. La mayoría de las entidades concede hasta el 80% del valor de tasación del inmueble como máximo, lo que significa que tienes que poner el dinero restante de tu querida hucha de ahorros en forma de cerdito. Esto significa que, si vale 70.000 euros, necesitarás tener 14.000 euros listos para la party. Así que ya sabes, asegúrate de tener el dinero que te piden antes de embarcarte en la aventura de una nueva hipoteca.
- Planéalo todo para empezar a pagar menos cuando tengas la hipoteca. Imagínate que entras en tu pisito reformado por primera vez con tu pareja, os tumbáis en la cama… ¡y os relajáis! Porque ya tenéis una hoja de ruta perfecta para pagar menos en vuestro primer año de hipoteca. Para que disfrutes de tu emancipación como solo tú mereces.
¿Ves qué easy es tenerlo todo organizado para disfrutar de tu hipoteca cuanto antes? Eso sí, no te lances como cuando le hablas a tu crush por Tinder, que esto lleva su tiempo. Estudia todos los detalles, escríbelos en un papel si hace falta y ponte en contacto con la entidad del Grupo Caja Rural que tú elijas para conocer las condiciones de la hipoteca que mejor se adapte a ti. ¡Suerte!
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