Ahora se llevan pantalones pitillo, ahora se llevan pantalones campana, ahora se lleva lo vintage… el mundo de la moda es como una rueda que no para de girar; cada día surgen nuevas tendencias y constantemente se establecen criterios de lo que es trendy a la hora de vestirse.
Compramos la ropa que mejor se adapta a nuestro cuerpo o básicos que aportan versatilidad, pero actualmente existe la tendencia de comprar ropa sostenible o promocionada por influencers.
Las modas son fugaces, pero no todos nos dejamos llevar por las tendencias del momento.
¿Qué tendencias decidimos seguir?
¿Alguna vez no te ha pasado que de ver tantas veces una prenda en redes sociales te has acabado enamorando?
Con el bombardeo informativo que tenemos por redes, televisión y diversas plataformas, nuestro gusto personal se puede ver influenciado por el papel clave que tienen estos medios en la creación de una moda.
En la era millenial tenemos un factor claro que destaca sobre el resto: los influencers.
Cuando un influencer recomienda “X” producto, en horas o incluso minutos, ese producto cuelga el cartelito de sold out.
Según el I Estudio Influencer Hub, llevado a cabo por la agencia Best, hasta un 62’5% de los usuarios encuestados ha seguido consejos de algún influencer para comprar un producto, probar un nuevo restaurante o elegir algún destino de viaje.
El mejor ejemplo de las modas se resume en una app: Tik Tok.
Desde la cuarentena, esta plataforma ha sufrido un crecimiento exponencial, convirtiéndose en una de las redes más usadas por los jóvenes. Entre los challenges, los bailes de moda y los lip-syncs todo el mundo ha acabado cayendo en sus redes.
Rompimos los cánones de color: rosa para niñas y azul para niños, creamos tendencias inesperadas, recuperamos la ropa de nuestros abuelos diciendo que es vintage, convertimos los challenges en los hot spots del momento…
Hemos cambiado las reglas del juego y las hemos hecho nuestras.
Y tú, ¿eres de seguir modas o vives en modo freestyle?