¿ES SU PROPIO JEFE? ¿PUEDE TRABAJAR DESDE CASA? RESOLVEMOS ESTAS Y OTRAS CUESTIONES
Ser freelance tiene sus ventajas y sus inconvenientes. ¿A quién no le gustaría trabajar desde casa? Desde luego, la capacidad de poder organizar tú mismo el trabajo y el tiempo casi parece un lujo pero, ¿es verdad todo lo que pensamos del trabajo de un freelance?
- Falso: no tiene ganancias mensuales. Todo dependerá del servicio que ofrezca, si trabaja por proyectos o tiene clientes estables.
- Falso: eres tu propio jefe. Cuando eres freelance no trabajas para ti mismo, sino para uno o varios clientes y son ellos (o él) quienes te pagan.
- Verdad: trabaja desde casa. Un freelance puede trabajar desde donde quiera, siempre y cuando tenga los medios necesarios para ello.
- Verdad: no tiene reemplazo. ¿Qué pasa si enferma? Si trabaja solo, el cliente deberá ser comprensivo y esperar; si tienes un partner de confianza, quizás pueda echarte una mano y sacar el trabajo adelante.
Comunica claramente tus tarifas y diferénciate de la competencia.
Nadie dijo que meterse a freelance fuera fácil. Pero, si estás pensando el hacerlo, ten en cuenta estos consejos:
- Plantea unas tarifas claras y un contrato de trabajo a la hora de colaborar con algún cliente. Se trata de “las reglas del juego”: si no están por escritas es cuando empiezan los problemas.
- Cobra el 50% por adelantado: aprende a valorarte como profesional y a que los demás también lo hagan.
- Crea una marca personal: algo que te diferencie y destaque frente a la competencia.
Cada uno tiene una manera diferente de trabajar pero, si eres novato en esto, quizás te ayuden nuestros consejos.