Dicen que de bien nacidxs es ser agradecidxs, y cuando vivimos de alquiler debemos aplicarlo a nuestro día a día. No hay nada mejor que llevarse bien con el casero para que luego te atienda y te ayude a reparar esos desperfectos que suelen pasar por la casa.
Eso sí, si quieres que vea lo buena gente que eres y seas el inquilino top level, lo mejor es que sigas leyendo este artículo. Hoy te vamos a explicar cómo completar la checklist del buen inquilino para que lo dejes anonadadx con tus buenos modales. ¡Vamos a ello!
La checklist del buen inquilino: ¡pon tus modales on fire!
Lo más normal cuando llegas a una casa nueva es quitarte los zapatos, lanzarte en la cama y sentirte como si ese fuera tu nuevo hogar. Bueno, en parte lo es, pero siempre debes recordar que solo estás pagando el alquiler y que tienes una responsabilidad como inquilino. Apúntate esta lista de cosas por hacer para ser el inquilino perfecto.
1. Cuida la casa como se merece
Cariño y más cariño. Si acabas de entrar en la casa tienes que tratar cada mueble y cada rincón teniendo en cuenta que ha sido pagado por el dueño, así que coloca las cosas más frágiles donde no se puedan caer e intenta planificar las limpiezas para que, en caso de que venga alguna vez a visitarte, lo tengas todo listo para sorprenderlo. Y si te falta motivación, piensa que has pagado una fianza y podrías decirle bye bye si se rompe algo. Ahora sí, ¿verdad? Así dan ganas de aplicarse con el cuidado del hogar.
2. No te saltes las mensualidades de la renta
Ya sabemos que en la empresa se demoran un poquito para darte el salario, pero eso es un tema tuyo y tu casero quiere el dinero en las fechas acordadas. Intenta que no se te retrasen las mensualidades y consigue un pequeño colchón de ahorro del que poder tirar dentro de un tiempo cuando vengan las vacas flacas. ¡Persona prevenida vale por dos!
3. Paga las averías si las has provocado tú
Aunque es muy tentador pedir ayuda al dueño con todo lo que te pase en la casa, tienes que ser honesto. Si la has liado intentando calentar la tortilla de patatas y el microondas está echando humo, lo más lógico es que pongas el dinero de tu propio bolsillo para enmendar el error. Y si no tienes claro quién paga quién, solo tienes que leer esta entrada de nuestro blog. ¡A darle candela baby!
4. Las fiestas, siempre con moderación
No vamos a decirte que seas unx monjx benedictino y te quedes encerrado en tu casa con el silencio como compañero de vida. Es razonable que invites a tus amigxs y queráis tomar un par de coca-colas light (ya tu sabes…) a la hora de la cena, pero intenta que la fiesta termine pronto para no molestar a los vecinos y déjalo todo limpio como una patena. La idea es que a las 12’00 de la mañana del día siguiente parezca que no ha pasado un alma el día de antes. ¿Conseguirás cumplir el reto, camarada?
5. Que no se te olviden las facturas, baby
Hemos hablado del caballo de Troya, las mensualidades, pero… ¿y las facturas que llegan cuando le apetece a tu compañía? En esos casos, lo mejor que puedes hacer es domiciliar este tipo de gastos, para no tener que preocuparte por ellos y que puedas apartarlos de tus presupuestos periódicos. Piensa que si te retrasas porque tienes que pagar los recibos manualmente podrías quedarte sin agua, sin luz… ¡o sin wifi! ¡Eso sí que no! Todos sabemos que si no hay wifi en la casa apenas se puede respirar, los días se hacen eternos y vivimos al borde del colapso, así que más te vale pagar las facturas a tiempo.
6. Llévate bien con el casero
Si el casero te dice que quiere ir a ver la casa al menos una vez al mes, no te queda otra que acordar el día y prepararlo todo la jornada anterior para que parezca la casa de la pradera. Lo mejor es que accedas a las peticiones razonables que te haga para evitar discusiones, o que haya mal rollito con él o ella. No te pedimos que te vayas de cañas con tu casero, o te presentes en la boda de su sobrino, pero siempre viene bien tener vías de comunicación fluidas para resolver cualquier tipo de… “diferencias” y tener un buen ambiente en todo momento.Con esto y un bizcocho… ¡ya tienes lista la checklist! Ahora ábrete un word, anota los puntos uno a uno y ve tachando los que ya cumplas. En el caso de que los hayas tachado todos no te asustes si el casero te ve como un buen pretendiente para su hijx, porque estarás hecho un ser humano del más alto nivel con el que además da gusto vivir. ¡Qué más se puede pedir!